Como cambian los tiempos dirían nuestros antepasados, y la pucha que cambiaron, para bien o para mal, según el entender de cada uno, pero cambiaron, y de esos cambios solo van quedando recuerdos, recuerdos de quienes peinamos canas, al igual que nuestros antecesores quizás nos quedamos en el tiempo, pero que lindo haber vivido esos tiempos, como dice la letra de un tangazo bien argentino “Te acordás hermano qué tiempos aquellos”!.
Ustedes dirán a qué viene todo esto,?
A solo efecto de recordar sitios en los que algunos bohemios que amamos este terruño llevamos dentro nuestro, quienes amamos esta patria chica llamada San Vicente, de la que aún mantenemos innatos recuerdos, cómo no recordar que el “Parque Urbano Viejo Casal de A. Korn fue el Casal de Cataluña”, lo que hoy es “Hendel Hogar fue el Bar de Pepe”, que el “Hotel Los Cazadores” frente a la vieja estación Empalme San Vicente de la familia Báncora, actualmente está casi en ruinas, al que ya casi nadie recuerda, o traer a nuestra memoria “El Pato Loco o el Poncho y Lazo”, que lo que en otrora fuese el “Hotel Central” de San Vicente en la esquina de Sarmiento y 9 de Julio, frente a
la Plaza Mariano Moreno hoy es una galería, que en la otra esquina de 9 de Julio y Bolívar se encontraba el “Bodegón y Hostería de los Delmonico” edificio levantado en barro, que en su ochava mirando a la Iglesia San Vicente Ferrer tenía un balcón, en el lugar hoy hay un chalet y una panadería” que el “Rancho de Fernando Ochoa es hoy un arruinado campo recreativo de los Municipales de Lanús”, que el “predio donde vivió la familia Korn, en el que nació el Dr. Alejandro Korn, hoy es el “Country o Barrio Cerrado Daromy” en el que no se ve ni una placa que recuerde el lugar”, que la hoy “Laguna del Ojo fue la laguna de San Vicente conocida también como del Sapo Gigante” por nombrar algunos de esos recuerdos, como que el “Polideportivo Municipal Padre Múgica, fue el Centro de Cazadores de Buenos Aires”, que “el pasaje peatonal frente a la estación de A. Korn que unía las calles Carola Lorenzini con Florida y desembocaba en Perú fue usurpado por potenciales y reconocidos vecinos para beneficio propio”, todos lugares emblemáticos, y así podríamos seguir enumerando infinidades de históricos rincones, lugares, predios que el tiempo enterró y continuará enterrando en el arcón de los recuerdos, salvo que algún día, alguna administración municipal desee poner en valor para conocimiento de futuras generaciones estos históricos lugares, que de no hacerlo vamos camino al olvido.
Por lo menos así lo veo yo.
Por S.A.C
